Hace 15 años conocí a un chico con quien salí durante un tiempo, pero nunca me atrajo. Aceptaba sus invitaciones, más que todo por diversión. Él siempre mostraba más interés en mí que yo en él. Llegamos a intercambiar besos, pero no me agradaron. A pesar de lo atento y dedicado que era, me desagrada algo en su olor corporal o no sé exactamente si fue algún otro rasgo. Me sentí mal al no corresponderle por algo que me parecía tan superficial, pero igual decidí no seguir saliendo.
No lo vi durante un par de años y un día nos encontramos. Se había casado y tenía una hija. Al parecer se estaba separando. Después de ese encuentro, comenzó a cortejarme nuevamente vía texto, pero no le hice mayor caso. Su esposa se enteró de estos mensajes y me armó un lío. Me molesté y corté todo tipo de comunicación.
Pasaron 7 años y un día recibí una llamada. Era él. Yo en ese momento afrontaba un par de problemas y, como es abogado, decidí consultarle. Iniciamos nuevamente una cordial amistad. Se disculpó por el hecho del pasado. Yo le acepté la disculpa. Continuaba casado, ahora con más hijos, pero nunca perdió la oportunidad para reiterar su interés en mí. Me decía que no era feliz con su esposa, que yo era el amor de su vida, que si le aceptaba la dejaría, pero yo siempre le aclaré que solo lo veía como amigo.
A lo largo de los últimos años, a pesar que casi no nos vemos porque vive en otra ciudad, nos mantenemos en contacto, aunque de forma esporádica porque cuando me niego a corresponderle y le recuerdo su estado civil, se aleja durante un tiempo. Sin embargo, reconozco que cuando lo he necesitado, no ha dudado en viajar para estar conmigo, me ha acompañado y ayudado en momentos difíciles y en ese sentido pienso que ha sido más consecuente conmigo que muchos otros hombres con quienes he salido o he tenido algún tipo de relación. Durante todos estos años, yo he tenido varías experiencias amorosas pero no he podido concretar nada, no funcionaron y de alguna manera me he sentido decepcionada, por lo que aún no me he casado, ni tengo hijos.
Ahora, casualmente un día después que me terminaran vía WhatsApp, me llamó para conversar y compartir un rato. Después de casi un año sin vernos, me contó que ya estaba en trámites de divorcio, dispuesto a iniciar una relación conmigo, si yo le aceptaba. Yo le conté lo de mi relación y que no era conveniente en este momento, sin embargo el hablar me hizo sentir un poco mejor, me levantó el ánimo, ya que me sentía algo triste y me pareció curioso que justamente un día después que había orado tanto por encontrarme ya de una vez por todas con un hombre que me quisiera de verdad, reaparece nuevamente. Sin embargo, aunque sé que es un buen hombre, que no ha dudado en demostrar un verdadero interés en mí, aún sigue sin gustarme, pero ahora de verdad quisiera corresponderle.
Me he preguntado: ¿será que he tenido el verdadero amor frente a mis narices y no lo he visto? ¿Será que puedo aprender a amarlo? ¿Debo darle una oportunidad? (Porque he leído que el amor es una decisión) o ¿será que si no me atrae físicamente, de plano ya no hay cabida para que surja algo más? Por otro lado, si lo rechazo nuevamente, temo nunca conseguir a esa persona especial que espero y, un día, cuando ya sea demasiado tarde, darme cuenta que cometí un error al rechazar a un hombre que sí me quería. ¿Qué me podrías comentar sobre esta situación amiga?
Norkis
Hola Norkis,
Gracias por tu pregunta y por pintarnos un cuadro tan claro de la situación.
Esta vez voy a ir al grano.
La pregunta que me haces, que viene a ser “¿debo estar con alguien que no me atrae?”, está formulada desde un espacio de inseguridad.
La inseguridad de “no conseguir a la persona especial que espero”.
Me estás planteando quedarte con alguien que no te gusta solamente porque crees que quizás nunca vas a encontrar a alguien especial que te quiera.
¡Por encima de mi cadáver!
Te lo pongo en negrita porque estoy un poquito enervada con la propuesta que me estás haciendo de tirar la toalla.
Si Edison se hubiera rendido después de cada una de las 999 veces que falló en inventar la bombilla, nunca hubiera llegado a darnos luz.
Ya sé que es frustrante no encontrar a la persona que esperas, pero la respuesta no está en aceptar a alguien que, en tus propias palabras:
“Nunca me atrajo”.
“Llegamos a intercambiar besos, pero no me agradaron”.
“Me desagrada algo en su olor corporal”.
“Solo lo veía como amigo”.
“Aunque sé que es un buen hombre, que no ha dudado en demostrar un verdadero interés en mí, aún sigue sin gustarme”.
Me preguntas:
“¿Será que he tenido el verdadero amor frente a mis narices y no lo he visto?“
No seré yo quien juzgue eso, pero me extrañaría mucho si alguien que es descrito como lo has hecho tú, se convirtiera en tu amor verdadero.
“¿Será que puedo aprender a amarlo?”
No se puede aprender a tener sentimientos por alguien. Se puede querer a alguien como persona con el tiempo y cogerle cariño, pero el término “amar” comprende un tipo de sentimientos románticos que surgen de forma natural y están ligados a la atracción.
“¿Debo darle una oportunidad? (Porque he leído que el amor es una decisión) o ¿será que si no me atrae físicamente, de plano ya no hay cabida para que surja algo más?”
Si apenas lo conocieras, podría animarte a conocerle mejor, pero me estás hablando de alguien a quien conoces desde hace 15 años, con el que has estado brevemente, no te ha gustado y te has pasado rechazando durante todo este tiempo.
¿Qué ha cambiado ahora para que te lo replantees?
Lo único que cambió fue tu pérdida de fe, tu desesperanza por no haber encontrado a nadie y por pensar que no puedes hacerlo.
Ese es el motivo por el cual te estás planteando la posibilidad de estar con este hombre y de forzarte a intentarlo cuando todo tu cuerpo te dice que no.
Estar con alguien porque las desilusiones pasadas han hecho mella en ti y han bajado tu autoestima, es un indicativo de fracaso total.
Si quieres intentar tener una relación con alguien, que sea porque te gusta, porque te hace sentir de maravilla, porque te apetece estar con él. No porque sientes que es tu última opción. Eso no es justo para ninguno de los dos. Le harías un flaco favor si lo aceptaras por esos motivos.
En lugar de plantearte si deberías estar con alguien que no te interesa lo más mínimo, empieza a trabajar en tu autoestima.
Construye una vida en la que alguien increíble encajaría a la perfección.
No puedes esperar conocer a alguien para que te levante el ánimo y la autoestima, sino que tienes que hacerlo tú por ti misma y eso es precisamente lo que atraerá a alguien que encaje contigo. Pero tienes que estar fuerte y, sobre todo, creer que es posible, que el hombre de tu vida existe y solamente está esperando al momento adecuado para presentarse.
Deja de mirar hacia el pasado y de hacerte cábalas sobre lo que podría darte una relación que ya está muerta antes de iniciarla y empieza a mirar hacia el futuro, hacia lo que quieres.
No me cabe duda de que vas a conocer a alguien increíble y tienes que tomarte las experiencias anteriores como aprendizajes que son totalmente necesarios para que cuando llegue la persona adecuada no cometas los mismos errores y enfoques la relación desde otra perspectiva.
Un abrazo,
Silvia
Norkis dice
Muchas gracias Silvia por ser tan clara en tu opinion la cual valoro, y tomare en cuenta sobre todo en lo que tiene que ver con el fortalecimiento de la autoestima; lo que me llevo a plantearme esa posibilidad es que ya no soy una chiquilla y me siento tan cansada y desgastada emocionalmente intentando y creyendo una y otra vez para que por alguna u otra razón siempre terminar igual, y por otro lado me siento molesta conmigo misma por no querer a quien me quiere y por estar perdiendo mi tiempo pensando en quien no me valora y ni se interesa por mi! No entiendo porque ocurren estas cosas pienso que todo sería más fácil y nos evitaríamos tanto sufrimiento si pudiéramos corresponder a quien si se interesa y se lo merece. Por otro lado, en verdad quisiera seguir creyendo en ese ideal de alguien especial con quien pueda experimentar un amor maravilloso, tal como se ve en las películas, pero he pensado que quizá solo sea un sueño, una idealización, que en nuestro romanticismo nos inventamos las mujeres y que de cara a la realidad a la final siempre nos termina haciendo daño. Gracias igualmente.
Ana dice
Norkis, espero que hayas encontrado a ese alguien, o por lo menos tu ilusión; que creas que lo mejor está por venir.
Te entiendo a la perfección. Sé por lo que estas/estabas pasando. Yo tras una no-relación de un año, empecé con un hombre que me amaba. ahora pienso que por los mismos motivos que tú describes. Y si, llegue a quererles, desearle…. Y he estado media vida con él. Una persona maravillosa, compañero de viaje corresponsable, padre fabuloso, leal, inteligente, que me amaba sinceramente ….te puedo decir que le quise, y le quiero, pero la falta de atracción inicial debe ser recurrente, porque se acabó traduciendo en muchos ¡muchos! años sin sentir deseo. Y te aseguro que por más que luches contra esa sensación,… acaba saliendo y marchita todo a su paso. Tu relación …..y tu propia autoestima. Dejas de creer que te mereces pasión. atracción….
Y te digo que sé que es sentirse desesperanzado porque estoy ciegamente convencida de que el amor no me espera en ninguna esquina… y es un sentimiento devastador. Apaga tu luz. Yo espero que el tiempo me la devuelva porque yo, como tú, como todas las buenas personas, tenemos una luz fabulosa que no debe ser apagada jamás.
Fernanda dice
Definitivamente estoy en contra de andar con una persona que no te atrae y es reconfortante saber que hay más personas que entendemos ese sentimiento, yo justo estoy terminando una relación con un hombre maravilloso por los mismos motivos, no siento atracción ni gusto ni pasión y entendí tal cual que no es justo para ninguna de las dos partes, es mejor solita que no tener al compañero de tus sueños.
Esther dice
Hola Norkis.
Este post tiene ya tanto tiempo que seguramente ya tendrás una situación totalmente diferente a la que cuentas, pero voy a exponer mi caso por si a alguien le sirve mi experiencia.
Yo comencé una relación hace 12 años con un señor 13 años mayor que yo.
Al principio, yo estaba súper enamorada, pero él estuvo mucho tiempo en plan perro del hortelano. Una no relación con todas las letras. Con el paso de los años, mientras él se iba enamorando cada vez más de mí, yo me iba desenamorando.
A día de hoy, llevamos una relación relación, haciendo vida de pareja 100%, aunque no concicimos
Esther dice
Perdón, publiqué sin querer.
Quería decir que no convivimos.
Él está muy enamorado de mi, pero yo, a pesar de que lo quiero muchísimo y que quiero estar con él, no siento atracción. Es como mi fiel compañero, la persona en la que primero pienso cuando me pasa algo bueno y cuando me pasa algo malo, pero sin embargo, me falta esa chispa, ese deseo, esa atracción… y el «problema» viene cuando por ser personas con instintos, te salen, pero por otra persona hacia la que sí sientes todo eso.
Y eso me pasa con un chico joven, 21 años menor que yo (él 27 y yo 48, y mi pareja, 61) que siento por él todo el deseo que no siento por mi pareja, y con el que a veces estoy y eso me hace sentir muy viva.
También debo decir que eso no me causa ningún problema, no quiero más con ese chico, aunque a veces siento remordimientos por mi pareja, por serle infiel 6 u 8 veces al año.
Lo que quiero decir con todo esto, es que tener una relación con alguien con quien no sientes atracción, puede hacerte buscar esa chispa que falta fuera de ella, con los consiguientes daños que eso puede causar.