Hola a todas, me ha encantado este espacio.
Hace un par de semanas, lo dejé con el chico con quien salía y, aunque ninguno de los dos lo dijo, yo simplemente ya no seguí buscando donde claramente no había interés de su parte.
Para dar contexto, ambos somos doctores en medicina. Nuestras jornadas laborales a veces sobrepasan las 50 horas seguidas, aunque a mí me queda más tiempo libre.
Salimos muchas veces, hablamos por mensaje todos los días. Un día, se fue de fiesta y desapareció dos días y yo me puse muy mal. Me dio sensación de abandono. Cuando se le pasó la resaca, escribió con normalidad. Hablamos de lo mal que me había hecho sentir y me dijo que no quería estarme haciendo sentir así por cosas que podía hacer fácilmente, como comunicarse más. Que no le había parecido importante, pero entendía que para mí, sí. La comunicación mejoró mucho de ahí en adelante.
Muchas semanas después, la comunicación empezó a caer en picado, pero él me dijo que sentía estar poco comunicativo, pero que estaba en sus peores semanas y estaba trabajando aún más de lo que podía. En fin, me sentí bien con esa explicación, pero dejaba de escribir durante días y yo seguía ahí. Él contestaba, era lindo, me contaba sus cosas y se sentía aún el interés. Me decía que me extrañaba y que necesitaba más semanas. Sin embargo, empecé a experimentar mucha ansiedad por su falta de comunicación, lo que no me pareció normal porque él me estaba explicando sus razones y todo bien.
Yo busqué terapia y comencé a leer libros que me orientaron sobre mis problemas de dependencia emocional, pero también sobre el respeto por mis límites. Es ahí donde llegó mi encrucijada.
Hasta ahora, era la mejor relación que había tenido, la más sana, pero creo que yo lo terminé agobiando porque a pesar de él decirme que estaba ocupado, yo seguía insistiendo en si necesitaba ayuda con algo, que no me gustaba el tipo de comunicación que teníamos, etc. Él nunca respondía a eso.
Lo mantuve así un mes, pero yo pensaba «por muy fatigado y ocupado que esté alguien, yo también tengo mucho que hacer y siempre hay tiempo cuando alguien te importa». Intentaba llamarle cuando él me decía que estaba en casa y no contestaba. Después, caímos en un patrón de “yo te dejo de buscar y entonces tú vuelves todo lindo y cariñoso, pero te vas a los 3 o 5 días”. Pensé que él estaba haciendo el esfuerzo porque los pocos días que nos escribíamos, él era muy lindo, ni parecía que no habíamos hablado en días, y me preguntaba por mis cosas. Sin embargo, yo seguía sintiendo que no estaba bien para mí.
Un día, le conté algo triste que me había sucedido y lo invité a salir con una idea super creativa y no contestó. Al siguiente día, me armé de valor para comunicarle mis límites y que esto no funcionaba para mí, que si podíamos resolverlo (yo evito mucho el conflicto por mis relaciones tóxicas pasadas y para mí esto requirió de horas de ensayo pensarlo bien). Él no contestó mi mensaje.
El día siguiente por la noche, me dijo que lo sentía, que estaba de postguardia y que tenía examen hoy y que lo habían suspendido, que habláramos ese día si podía yo. Yo en ese momento, habiendo sido ignorada por más de 5 días, ignorada mi situación triste e ignorada mi invitación a salir y mi conversación importante, me sentí destrozada pero con valor de decir «no me merezco esto» y le dije que entendía, que no era buen momento para mí y que hablaremos otro día.
Hasta el día de hoy (que creo que ya van 3 semanas o más), nadie más escribió ya nada. Ni él me contestó ese mensaje, ni yo seguí insistiendo. Borré su chat y eliminé su número.
Sigo en la terapia, entendiendo mis problemas de infancia y carencia, encontré tu libro en Amazon y esta hermosa comunidad que no hace ver a los hombres como los importantes, si no a nosotras como las importantes para mandar a la mierda a todo aquel que nos haga perder el tiempo.
Mi consulta es porque a pesar de que he tomado una decisión que es valiente y la correcta, lo extraño mucho. Éramos increíbles juntos, aún me siento culpable de haberlo hostigado cuando él quizá solo necesitaba espacio, sin embargo, también sentí que él retrocedió por mi comportamiento y en vez de poner las cosas claras, estaba ahí dando migajas de vez en cuando, siendo increíble como si nada pasara (quizá nada pasaba para él), pero para mí esa comunicación era una mierda. Ya estaba solo cuando él quería estar, pero si yo lo necesitaba, no estaba.
Me costó mucho diferenciar si era mi dependencia emocional o mis límites reales, pero yo no quería esa comunicación y él ya lo sabía y, aún así, seguíamos en lo mismo. No sé si hice bien en no decirle yo también que ya no estaba bien con eso, en no tener esa última llamada (para mí, esa llamada ya iba a ser de reclamos innecesarios y me iba a sentir más humillada después) o si debí ser más paciente ANTES de caer en ese patrón de mala comunicación… O si debí mandarlo a la mierda antes.
Me enamoré de él. Y me cuesta trabajo día a día entender por qué se alejó si él parecía perfecto y siempre me dejaba todo en claro. Sin embargo me repito «tampoco es que te haya buscado desde que ya no estás ahí y menos le ha importado todo lo último que dijiste». Quiero que vuelva, pero yo creo que debo trabajar más en mis traumas y él debe saber si quiere una relación real con toda su carga laboral, porque yo sé que a pesar de mis traumas, siempre hay tiempo cuando alguien te importa.
Vane
A continuación, el audio respondiendo a esta consulta y comentando los temas más importantes que se pueden extraer de ella.
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Ana Isabel Martínez Bermejo dice
Yo me pregunto si los hombres tienen también estos líos. Parece que ellos son fríos, distantes, egoístas… Pero también son de carne y hueso. En estas consultas y en la vida real observo a las mujeres tragando, aguantando, sintiendo culpa, luchando por relaciones sin sentido…. Y ellos?
Álex dice
Buenas noches Ana Isabel, claro que los hombres tenemos estos mismos líos, exactamente igual que vosotras, porque hay hombres con la misma sensibilidad o más que la mayoría de las mujeres, al igual que hay mujeres frías y sin escrúpulos como algunos hombres, como en todo no se puede generalizar.
Mireia Sampedro López dice
Me encantan los episodios!! TODOS!! Creo que dices verdades como puños!! Ánimo Vane porque mereces alguien mejor, que tenga tiempo para ti y escuche de verdad tus problemas. Que respete tus estándares y que sea bueno para ti! Besitos! Silvia eres increíble ☺️
Magia dice
Vale has sido muy valiente marcando límites. Yo he pasado una situación parecida y también dudaba, hasta que hice el «mira manolo», con un poco de retraso
Un abrazo!
Mónica dice
Hiciste perfectamente bien, jamás dudes de tus propias decisiones. Y claro que merecías más atención y preocupación de la otra parte y encima te paraba dejando colgada como decimos en mi país. Hiciste bien en mandarlo a la mierda.