
¡Hola Silvia! Qué gusto me da encontrar un blog donde traten estos temas de manera muy profesional, clara y directa.
Te escribo porque quiero contarte mi caso. En el mes de agosto, me inscribí en una app para conocer gente y empecé a tener algunas citas. Tengo 39 años y, a mi edad, es difícil encontrar gente soltera o disponible. Las 3 personas con las que salí son divorciados y con hijos. Hubo uno de ellos que me interesó un poco más, y me di la oportunidad de seguir conociéndolo más, así que dejé de salir con los otros 2. A la segunda cita, me dijo que yo le gustaba y quiso besarme. La verdad es que no lo permití y le dije que nos siguiéramos conociendo. Pasó un poco más de un mes y me robó un beso. Al final terminamos besándonos. La verdad es que es un buen muchacho, pero tiene apenas como 2 años de divorciado y un trabajo complicado. Nos hemos seguido viendo, pero cuando planteamos lo que queremos en una relación, él me dice que no quiere volver a casarse y que no quiere hacerme perder mi tiempo, pero también me dijo que no está jugando conmigo y que yo le parezco una mujer madura e inteligente. Ahorita ya tenemos casi 3 meses de salir, aunque nos vemos solo como 3 o 4 veces al mes. Hace 2 semanas pasamos 3 días juntos y me comentó que le sorprende, que él no es de pasar tanto tiempo con una persona y conmigo estuvo todos esos días. También ya conozco a su hija de 4 años y siempre me hace comentarios de cosas que podemos hacer o planes de salir y de que poco a poco quiere ir involucrándome en su vida. Mi duda es la siguiente, no sé si seguir conociéndolo y dejar que las cosas fluyan o si ya es el momento de tener la conversación y preguntarle qué somos. Y también quiero saber como puedo preguntarle si él está saliendo con más personas. Te agradezco la ayuda y orientación. Saludos y bendiciones.
Sandra
Hola Sandra, gracias por hacerme una consulta tan detallada y con las dudas bien claras.
Cuando empiezas un escrito diciendo “a mi edad, es difícil encontrar gente soltera o disponible”, ya estás grabando una sentencia negativa a fuego en tu propia realidad y estás añadiendo un plus de dificultad a la búsqueda del amor, lo cual no te interesa.
Hoy no voy a extenderme sobre este tema, pero sí aprovecho para decirte que hace poco tuve una clienta de 56 años, recién divorciada, que conoció a varios hombres disponibles y terminó quedándose con su actual pareja, con la que es muy feliz.
Quiero continuar por tratar lo que me ha parecido más importante, Sandra.
No me has comentado en ningún momento cuál es tu opinión sobre el matrimonio y, en este caso, es algo que deberías plantearte. Si tienes muy claro que quieres casarte, salir con alguien que ya te ha subrayado que no quiere volver a pasar por el aro, te hará perder un tiempo precioso, sobre todo si, además, quieres tener hijos.
Si no tienes intenciones de pasar por el altar, entonces no hay problema.
El hecho de que os veáis de forma regular, hayáis hecho ya una escapada juntos, conozcas a su hija y él te diga que quiere involucrarte en su vida, me parece positivo y me extrañaría mucho que estuviera haciendo lo mismo con otras chicas porque, cuando hay niños de por medio, la gente suele volverse mucho más cuidadosa con quién trae a casa, por razones obvias.
Por otro lado, me preguntas cuándo tener “la conversación”.
Si os vierais más a menudo, te diría que ya va siendo hora de tener claro qué está ocurriendo, pero el hecho de que solo os veáis 3 o 4 veces al mes, hace que no os conozcáis tanto.
Para mí, lo ideal es no tener que preguntar “qué somos” porque el hombre te va mostrado su cartas y te lo acaba diciendo (hablé de ello en este artículo), pero lamentablemente no vivimos en un mundo perfecto y a veces hay que iniciar esa conversación, muy a nuestro pesar.
El cuándo es cuestión de sensaciones.
Pregúntate cómo te sientes. Si estás en un punto en el que piensa que estás a punto de explotar porque llevas un tiempo dudando y tragándote esas incertidumbres, como si fueran cerveza fresquita en una tarde de agosto, es el momento de sacar el tema.
Si crees que puedes darle un poco más de tiempo a tu hombre para que se espabile y te diga de una vez que no puede vivir sin ti, estás disfrutando del proceso de conocerle y no sientes un agobio demasiado fuerte, entonces espera un poco.
Según lo que me has dicho, creo que aún te queda un poco de mecha, así que espera a que se queme y trata de vivirlo con tranquilidad. Con un poco de suerte, él te sacará el tema antes de que explotes como un petardo en la hoguera de San Juan.
De todos modos, no te voy a dejar en pelotas, amiga. Te voy a dar un par de indicaciones por si (Dios no lo quiera) necesitaras tener la conversación.
Tanto si quieres preguntarle sobre exclusividad, como si deseas saber qué sois, la premisa es la misma: no enfocar la conversación como si estuviera en juego el futuro de un país. La actitud debe ser más natural, como si te encontraras a un vecino en el ascensor y hablarais del tiempo.
Por lo tanto, ni se te ocurra decirle con antelación la frase: “tenemos que hablar” o nada parecido porque te va a llegar con el culillo apretado y unas cuantas excusas en la recámara, por si las moscas.
Encuentra un momento en el que ambos estéis de buen humor, pasando un rato agradable, relajados, de cena, paseando, y ahí le dejas caer la bomba, pero, así con disimulo, como si no fuera contigo la cosa.
La clave está en centrarte en ti, en tus sentimientos, no en bombardearlo a preguntas.
Te voy a mostrar un par de frases para que entiendas a qué me refiero. Tú puedes crear tu propia versión, acorde con tus sentimientos.
Para la exclusividad: “me lo estoy pasando genial conociéndote y me gustas un montón. No hemos hablado de esto aún, pero a estas alturas, me dolería un poco que estuvieras viéndote con otras chicas. ¿Cómo lo ves tú?”
Para el qué somos: “me gustas mucho y me lo paso muy bien contigo, así que me gustaría seguir conociéndote, pero me agobia un poco no saber en qué punto te encuentras tú”.
Y con estas mágicas frases, probablemente conseguirás que te diga lo que piensa sobre el tema sin sentir que le estás acribillando a preguntas o que le estás reclamando algo, así podrás decidir si te interesa seguir o si estáis en puntos muy lejanos y vas a tener que mandarlo a freír espárragos.
Espero que estas sugerencias para tener “la conversación” te hayan resultados útiles, pero que no tengas que usarlas. Ya nos contarás.
Y si te interesa ahondar en este tema, saber cuándo es el mejor momento para tener “la conversación” y recibir un poco de ayuda para decir las palabras adecuadas para tu situación, este episodio de PsicoAmor, te sacará de dudas.
Un abrazo,
Silvia
Deja una respuesta