Hola Silvia,
Lo primero, GRACIAS por tu contenido, humor y naturalidad. Me ayudas un montón.
Estoy en pleno duelo, tras año y medio de relación.
Después de muchos TDH, apareció el que pensaba que iba a ser el definitivo porque me encantaba. Tuvimos un comienzo de relación precioso, todo tan mutuo y serio desde el principio que no me lo creía: comunicación a diario, planes juntos varios días por semana, noches en su piso, escapadas… y me incluyó muy pronto en su círculo de amigos y yo en el mío. Además, compartíamos valores de vida y profesión, lo que nos unía más aún.
Sin embargo, yo sufría un poco porque era de Sevilla y cada muy poco se iba 10-15 días para allá. Era un apasionado de su tierra y su gente. Yo lo entendía y respetaba al 100% porque me importaba verle feliz y su mundillo era parte de su encanto. Es más, me moría porque me llevara y me imaginaba viviendo allí juntos en un futuro. Pero nunca pasó. Todo lo que compartía conmigo sobre su vida allí eran palabras.
Por otra parte, le costaba horrores hablar de mí a su familia y lo de conocerles era otro nivel. Cuando le sacaba el tema porque para mí era importante, no profundizábamos, le incomodaba. Era un poco frío con los sentimientos y eso chocaba con mi forma de ser. Además, sus amigos de toda la vida me decían que tuviera paciencia con él, que iba despacio con estas cosas y que nunca había llevado a casa a chicas, que yo estuviera tan incluida en su grupo de amigos era algo nuevo. Tuve mucha paciencia, pero no podía evitar expresarle entre lágrimas algún gesto que me dolía y yo sé que eso le agobiaba.
Después, vinieron meses reguleros: me dejaba en último lugar tras pasarse el finde de fiesta – siesta – fútbol con los amigos. Yo no estaba contenta pero no quería verlo, le justificaba siempre porque le quería y pensaba que era un bache. Al final me dejó. Su argumento? «Siento que no te echo de menos cuando me voy y que puedo estar un finde sin verte cuando tú no. No es justo para ti y te estoy haciendo daño». Me duele porque lo hizo tras cenar conmigo por ahí y haber hablado y reído, como si no estuviera del todo en sus planes y eso me descoloca. Pienso que era el momento perfecto para él: venía el mes de Semana Santa y Feria y prefería estar tranquilo disfrutando sus fiestas sin rayarse por mí.
Han pasado 2 meses y contacto cero. Le echo de menos y me gustaría una segunda oportunidad, ahora que se me ha bajado del pedestal en el que lo tenía y tengo claros mis estándares.
¿Cómo ves esta historia, Silvia? ¿Cómo encajar que aunque todo cuadrara a la perfección al principio, a uno de los dos se le vayan las ganas así y no quiera buscar soluciones? Al principio no había banderas rojas.
¡Muchas gracias por todo!
Pepa
¿Qué te ha parecido este episodio? ¿Quieres comentarle algo a nuestra protagonista de hoy? En la sección de comentarios, puedes darnos tu opinión y tus consejos.
Si quieres ser protagonista de un nuevo episodio de PsicoAmor, haz clic aquí para formular tu consulta.
Tenemos un maravilloso grupo de Telegram para suscriptoras y puedes unirte desde aquí.
Esto es todo por hoy.
Nos vemos cada martes a las 7 de la mañana con un nuevo episodio de PsicoAmor.
¡Hasta la próxima!
Hola…
Es curioso como cuando estás dentro no ves las banderas rojas y desde fuera se ven muy claras.
He leído esta mñn la historia pero me he querido tomar el tiempo que merece para dar mi opinión. Comprendo a esta MariCarmen. La entiendo tanto, que puedo sentir su dolor. Como comentaba después de mucho TDH, se ilusiona y se ilusiona tanto que aunque había banderas rojas, las ignoro. Porque está bien que quiera ir a su tierra, pero de verdad nunca en 1 año y medio ha habido esa oportunidad de ir con el? Porque tú si querías el. Él no quería. Seguramente no te ha mencionado ni a la familia. Ha priorizado hasta una siesta!
MariCarmen, lo siento con todo mi corazón, porque se lo duro que es que te lo digan, pero a ese hombre lo has idealizado. Pero no te ama como mereces que te ame. Y no deberías conformarte. Si ahora, que ya llevas 2 meses de duelo, reculas… has perdido lo que aunque no te parezca, has avanzado. No olvides por favor que ha sido él el que ha dejado la relación. Plantearte volver con él, significa que vas a aguantar muuuuuchas más cosas que antes, porque va a ver que te tiene segura.
Tengo 48 años. Estoy como tú, en un duelo de 2 meses. Acabo de salir de una relación de 8 años con el que ha sido el hombre de mi vida (lo tengo claro a estas alturas) pero hemos tenido tantas idas y venidas, que no se lo deseo a nadie. No des más oportunidades, porque solo vas a retrasar la decisión final y en ese proceso te vas a quedar sin ti, sin nada de autoestima. Así que sé valiente. Habrá días mejores, y otros no tantos (sobretodo no pienses que son malos porque no lo son). Acaso cuando has estado con él has estado en una nube de felicidad completa? No. Porque? Porque te preocupaban cosas, le has dado muchas vueltas a palabras, situaciones,…
Sé que es muy fácil escribirlo. Que los toros se ven muy bonitos desde la barrera. Pero no, mi chica, me pongo en tu piel y lo sufro contigo. Animo! Estoy segura de que encontrarás al hombre que realmente te merezca, y sino, sé feliz con lo que tienes, que seguro que es mucho. Un abrazo enorme!!