Hola Silvia, he estado 1,5 años en una no-relación dolorosa, ha pasado 1 año y sigo mal.
Estoy casada, pero hace mucho que nos desconectamos, él tuvo depresión, no lo vimos, yo cada vez estaba más sola, él no prestaba atención ni a los niños. Al final, vino una liebre y me enamoré.
La liebre estaba también casada y éramos amigos desde que nos mudamos al pueblo de mi marido en 2021. Él siempre dijo que no dejaría a su mujer, pero que yo le daba todo lo que le faltaba, y yo, en un sitio que no era mi hogar, no veía posibilidad de salir de ahí sin perder a mi amor y me quedé.
Él también se enganchó, hacía todo por verme, aunque fuera 1 segundo, hablábamos horas, era relación de noviazgo, no solo sexo. Yo estaba confundida, palabras y actos, no concordaban, decía que no dejaría a su mujer, pero sus acciones eran de alguien que te quiere, y mucho.
Cuando mi marido nos pilló, habló con su mujer, no le creyó. Mi amante sigue con su mujer, le dijo que no hubo nada, luego solo besos y luego que habíamos tenido sexo, supongo que le diría que solo 1 vez.
Quería que arreglara mi matrimonio para que en el pueblo nadie sospechara, pero yo necesito vivir una vida de verdad, ellos solo quieren vivir de apariencias.
Sigo en bucle, busco respuestas, ¿cómo una persona tira por la borda su vida por las apariencias? Sé que yo sola tengo que dar un cierre sin respuestas, pero es complicado, no puedo hacer contacto 0, mismo cole, amigos… yo le aconsejé que, si quería seguir con su mujer, fuera desde la verdad y no siempre con miedo a ella, pero sigo sin entenderlo.
Ella me contó que todo lo que le gustaba de él al principio, ahora le molestaba. Él me dijo que lo peor del divorcio sería perder la familia política… y tantas cosas más.
No confío en él y no quiero una relación, quiero superarlo, pero querría que fuese feliz de otra manera, no atrapado ahí.
No hay pregunta específica, me gustaría que lo analizaras, que me ayudes a pasar página.
Ana
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Hola Silvia, soy la protagonista, primero de todo muchísimas gracias por desgranar mi historia, y hacerme ver que no puedo esperar nada de una persona que elige cada día su vida, y punto. Lo has explicado todo muy bien, lo único que sigo pensando, es que no es feliz, no he podido contarte tantas cosas que me llegó a decir, sobre que no hacia nada con su mujer que le llenara, y tampoco ella le dejaba tener sus propios hobbies o aficiones, hasta los amigos que debe tener se los impone, que pensaba constantemente en mí, y eso le hacía estallar la cabeza, pero que luego, llegaba a casa, y su vida era esa, y ya está, no podía hacer nada. Al final, da igual como viva su vida, si es feliz o no, él la elige día a día, y con eso me tengo que quedar.
Pues es un poco eso, que sea feliz o no con su vida, es la que ha elegido. Y ahora te toca elegirte a ti y construirte la vida bonita que tú sí quieres tener.
Yo he estado ahí.
Me enamore de mi compañero de trabajo sin saber que estaba casado( sin hijos).
Me lo dijo después de darme el primer beso pero ya nos habíamos enamorado.
Decidí seguir con la convicción de que nuestro amor era más fuerte y que iba a separarse.
Eso nunca ocurrió.
Me decía que su mujer era depresiva, que estaba medicada y que él tenía que cuidarla.
Me cansé de recibir migajas y con muchísima pena le dejé.
Es muy duro pero la lección que yo saqué es que esa situación ocurrió porque yo tenía baja autoestima.
Me armé de valor y me dediqué a mí misma.
Ahora he entendido que yo soy el amor de mi vida.
Nunca hay que aceptar migajas de nadie: ni de parejas, ni de amigos, ni de compañeros de trabajo, ni siquiera de tu propia familia.
Yo también viví una relación con un casado. Éramos amigos y me apoyó en un momento difícil de mi vida. Ellos vivían separados, ella con su familia y no se juntaban ni en navidades ni en vacaciones…..eran como amigos y el me dijo que no se separaría de su mujer pero que ambos se habían dado libertad mutuamente. Sin embargo, cuando ella vio que nuestra relación avanzaba cayó en depresión, estuvo ingresada, en tratamiento psiquiátrico, de baja un año, empezó a encadenar problemas de salud hasta tener una discapacidad que la dejó sin trabajo y en la miseria. Volvieron a vivir juntos y a mí me decía que entre ellos no había nada……bueno, yo creo que todos tienen el mismo rollo.
Llegó la pandemia y yo me sentí liberada, cuando se acabó el confinamiento rompí con el, que no entendía porqué le dejaba.
El que los entienda que los compre, a ellos y a ellas. Bueno, la explicación para mí es que el matrimonio les aporta un estatus social, amigos comunes, vida familiar, (en mi caso no tenían hijos), bienes comunes…… Ellos son como los gatos que les gusta salir de aventura durante el día y volver al refugio casero por la noche. Y ellas, pues también conozco amigas que prefieren vivir con cuernos a vivir solas.
Pero allá ellos, las Maricarmenes no estamos para ese tipo de personas.
Anda que no hay hombres y mujeres mentirosos que fingen estar en matrimonios a disgusto solo para tener a la vez lo mejor de los dos mundos sin perderse nada.Al cónyuge para la casa, dinero, compañía, etc y al amante para tener la salsa que les falta….Pero piensa que puedes comer macarrones hervidos o con tomate, pero el tomate solo no es comida…Deja de ser solo el tomate y convíérte en unos deliciosos macarrones boloñesa de alguien…Abandona al soso y al mentiroso y vete a Australia por ejemplo
Buff!! yo también estoy ahí. 10 años con una pareja fiel y estable. Dos hijos pequeños en común y yo agotada de posponer mi trabajo, mi felicidad y vida por cuidar a mi familia… Cambio de trabajo y aparece una liebre, no sé si he podido llorar más en toda mi vida sin saber qué era lo que me estaba pasando. En mi relación no era muy feliz. Después de 6 meses de “amistad” con mi liebre una noche me besó y no supe/quise parar. Dejé a mi pareja, que lo sabía todo, pero que esperaba que fuese pasajero.. Tenemos que seguir conviviendo. los fines de semana. Mi ex no quiere decir nada a nadie, ni a su familia. Todo mi círculo lo sabe, incluido que tuve una liebre. Mi liebre sigue rondando mi cabeza y mi vida, dos vidas muy diferentes, él con hijos adolescentes, los míos son niños aún y viviendo en otra ciudad. Él separado desde hace muchos años pero con una vida muy asentada y muy llena de planes en los que yo tengo poco hueco y yo esperando mis migajas y siento que también sólo ofrezco migajas. Casi todo mi tiempo libre es para mis hijos!! Después de terapia estoy aprendiendo a gestionar un poco mejor todo esto, Aprender a cuidarme y poner límites. Pero me resisto a olvidarme de mi liebre, muchas conversaciones incómodas pendientes. Y mucha herida de otras relaciones anteriores.
Uf, que duro, te diría que ahí no es, no tenemos que aceptar migajas. Yo estoy intentado salir de el enganche que me produce el montón de conversaciones incómodas pendientes, que luego el mismo dijo que no se atrevía a afrontar, y por eso las iba posponiendo… tenemos que querernos primero a nosotras mismas, mientras estés ahí, no encontrarás la persona que te llene de verdad.
Yo tuve una pareja durante 15 años que tenía muchas amigas. O eso creía yo. En realidad eran amantes a las que enamoraba y les contaba que estaba conmigo, pero que yo era una depresiva y una triste (spoiler, era mentira). Cuando una de ellas se cansaba de esperar a que me dejara, la sustituía por otra. (De todo esto me enteré bien cuando dejé la relación y me llegó esta información por varios lados). Cuando lo dejé me lloró diciendo que yo era la mujer de su vida y que quería envejecer conmigo. En fin… ahí lo dejo.
Así que os planteo algo: ¿puede que os estén mintiendo respecto a la relación que tienen con sus mujeres?
Todos conocemos algún caso, ya sea por propia experiencia o por conocidos.
Yo tengo varias amigas que son ellas las que llevan doble vida, algunas con amante de muchos años y otras enlazando relaciones.
A la pregunta de por qué siguen en esos matrimonios, unas contestan que son hombres maravillosos, que les dan estabilidad, buenos padres… y que la aventura es lo que les da vidilla.
Otra está casada con un hombre que ni para relación estable le sirve, a todos lados va sola, incluso a bodas, pero el romper con todo eso le da tanto vértigo que prefiere ir picoteando por ahí hasta que ellos se enamoran y entonces los deja.
Así que el panorama es igual para ambos géneros. Una pena.